En Morelos a la mujer se le respeta (porque la violencia de género tiene que parar)
La vida social es muy complicada. Hay que admitirlo. Compartir el territorio, implica, también negociarlo, esto genera fricciones pequeñas, que poco a poco se transforman en asuntos sociales complejos. En lugar de ignorarlos, minimizarlos o, incluso, invisibilizarlos, nos toca discutirlos y tratar de –lentamente– desarticularlos.
Un problema muy serio al que nos enfrentamos a nivel global es a la trata de personas. Este tipo de violencia tiene muchas vertientes (comercio de seres humanos, esclavitud, explotación sexual, etc.) Es difícil terminar con este asunto, para empezar, porque involucra muchos otros fenómenos sociales y de violencia. Además, sabemos que, aproximadamente, como negocio, la trata hace circular más de 32,000 millones de dólares al año.
De los 4 millones de víctimas de este fenómeno, la mayoría son mujeres y niñas; por esto el tema ha sido ligado a asuntos de género y analizado desde las trincheras feministas. Este tipo de violencia hacia la mujer es sólo uno de los múltiples a los que las morelenses se tienen que enfrentar todos los días.
Pero tenemos las herramientas para frenarla y la más importante es empezar a involucrar a tantas personas como sea posible y, de esa manera, darle lugar a estos temas en las mesas de conversación. Y ¿cómo hacer conciencia de forma pacífica e inclusiva? Algunos dicen que bailando…
Esta iniciativa comenzó el día de San Valentín en 2012 y es la acción comunitaria contra la violencia hacia la mujer más grande de la historia. La idea es que, en distintas partes del mundo todas las participantes compartan una sesión de baile, con la misma coreografía, en signo del levantamiento en contra de este terrible fenómeno social. La trata y la explotación son algunas de las causas más importantes; pero la complejidad termina por reunir estos asuntos con otros como el racismo, las guerras, los derechos sobre la tierra y la pobreza.
Este año, la palabra clave del evento es solidaridad. En México hoy resuena de forma muy especial y nos recuerda que las secuelas del sismo de septiembre de 2017 siguen vigentes y aún nos toca ser solidarios. Los organizadores de esta acción masiva explican que muchas mujeres afectadas están más expuestas que nunca a asuntos de violencia.
Bailar nos reúne, nos invita a exponernos, soltarnos y compartir este momento con otros, a través de la música. Bailar es un acto que contorsiona al cuerpo, recordándonos que no es fijo, que se puede transformar, que somos mucho más de lo que aparentamos. Todos podemos bailar, no importa nuestro origen, nuestro nombre, nuestra religión, lengua o género. Bailar invita a la armonía.
Así ¿por qué no suspender por un rato los problemas cotidianos? Desde los más pequeños, hasta los más terribles, podemos suspenderlos a través del baile y retomar este impulso, para sacarlos de nuestra vida.
Además de participar en esta increíble manifestación pacífica, hay algunas cosas que podemos hacer para darle solución a esto a largo plazo. Particularmente, nos toca informarnos, saber qué es lo que está pasando, aunque sea doloroso o complicado, hay que estar al tanto de lo que sucede y de cómo podemos ayudar.
A continuación, nos toca dialogar, compartir las experiencias negativas y positivas, los miedos y las soluciones que hemos experimentado. No sólo dialogar entre mujeres, intercambiemos con todas las personas que nos sean posibles, construyamos redes de confianza.
Después, se trata de mapear el panorama para identificar las herramientas con las que ya contamos. En Morelos existe una amplia legislación en contra de la violencia hacia la mujer y todas y todos tenemos derecho a hacerla valer. Además hay apoyos para madres solteras y mujeres emprendedoras. Nos toca aprovechalos.
Por último, se trata de modificar nuestras propias acciones y formas de pensar. A veces, sin quererlo, nuestros actos o ideas motivan este tipo de violencia. Cuidemos a todas las personas que nos rodean, procuremos que sus vidas sean realmente agradables y satisfactorias; sin duda, si los que nos rodean se sienten bien, el entorno para nosotros será muy positivo también.
¿Estás lista para bailar? La cita es el miércoles 14 de febrero a las 12:00 hrs, en la Plaza de armas de Cuernavaca.
Revisa aquí más información sobre el evento en Morelos.
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