Hay que aprender a comer como local. Especialmente en un lugar de tan rica tradición culinaria como Tepoztlán, Morelos. Aquí la cultura del changarro no deja nada que desear (seguida de cerca por la de la capital morelense); además, los locales saben, como nadie, lo que es bueno para darle gusto al paladar.
Encima, ¿qué puede ser más auténtico que la experiencia de conocer y disfrutar los ingredientes de la zona, combinados por la mano maestra de los y las cocineras más experimentados? Y lo mejor de todo: el precio es justo y lo que uno compra se va a los bolsillos de la economía familiar en la zona. Por eso, al viajar, hay que permitirse probar lo que ofrece el lugar que felizmente nos recibe y no dejarse llevar por el impulso de ir a los grandes restaurantes.
Dicen que lo más inteligente es visitar los puestos y changarros donde se ve que hay más gente; pues si son muy populares, seguro que la comida es fantástica; pero los locales se guardan aún algunos secretos y te los compartimos, para que no te pierdas de las mejores delicias de Tepoztlán
Las mejores quesadillas tradicionales, con Doña Lupita
Tepoztlán es famoso por sus ricas quesadillas. Y ¡cómo no! Si las tortillas están recién hechas, con masa nixtamalizada; el queso Oaxaca que encuentras en Morelos es casi tan rico como el de su estado de origen; los guisados para rellenarlas son deliciosos, y las salsas… Lo único que tienes que saber es que, si vas a Tepoztlán, tienes que probarlas y las de Doña Lupita tienen tantos años de tradición, que se rumora que el suyo es de los primeros puestos en haberlas ofrecido. No olvides probar el atole de ciruela, es algo verdaderamente especial.
¿Dónde? Su puesto se encuentra sobre la carretera a San Juan Tlacotenco (pueblo aledaño de Tepoztlán) del lado derecho, si vas de subida. Está a sólo 3 km entrando a la carretera desde Tepoztlán.
Los esquites de Doña Tere, con 47 años de tradición
Hay locales que juran que estos son los mejores esquites de Tepoztlán. Y posiblemente sea cierto. Utilizan sólo los mejores elotes de cosecha local y el caldito tiene un delicioso sabor dulzón, perfumado con epazote.
Si vienes de una ciudad, vas a quedar maravillado con la calidad, no sólo de los ingredientes principales, también del queso cotija, la mayonesa y hasta los limones (recién cortados del árbol de Doña Tere).
Si no te gustan los esquites, cómete un elote tiernito (ella te ayuda a elegirlo) o pregunta por los deliciosos tamales de elote con mantequilla: son el postre perfecto. Si los amas, no te pierdas los “chichaesquites”, chicharrón de harina decorado con ricos esquites.
¿Dónde? Sobre la calle 22 de febrero, subiendo por la avenida principal, 5 de mayo, a sólo unos metros de distancia. El puesto está situado en el estacionamiento de una casa. Pregunta por Doña Tere y sus elotes.
Para el postre: los tlaxcales de la familia Martínez
Los tlaxcales son una especie de galletas suaves de maíz con canela y azúcar que se cuecen en el comal. Son típicos del estado y de origen prehispánico. Cada familia tiene su propia receta, pero los Martínez hacen unos francamente deliciosos. Tómalos con un rico café de olla.
¿Dónde? Sobre la Avenida del Tepozteco, casi esquina con Galeana, frente a la biblioteca del pueblo, junto a una distintiva dulcería. El rico olor a canela y azúcar te guiará hasta ellos.
Las quesadillas fritas de Doña Mari
Doña Mari tiene lo que bien se podría llamar una “cenaduría callejera”, pues, después de las 7.30 de la noche abre un puestito en donde te aseguran que tu última comida del día va a ser la mejor. Cada noche tiene distintas cosas, se intercala entre pozole, taquitos dorados, tostadas y las más deliciosas quesadillas fritas. Estas se preparan con masa de maíz y se rellenan con deliciosos ingredientes. Llega temprano para que no te pierdas las clásicas de acelga con calabacitas y queso. La salsa verde no tiene comparación…
¿Dónde? Tienes que subir hasta el final de la calle Cuauhtemotzin, casi hasta llegar a la carretera hacia Cuernavaca. La subida es dura, pero valdrá la pena.
Los tamales de temporada con Doña Cristi
Son tamales de temporada, porque siempre los prepara con ingredientes locales y de la época. Así, además de los clásicos de pollo o cerdo con salsa verde y roja, los de rajas con queso y los de dulce, encontrarás los deliciosos tamales de setas, de flor de árbol de colorín y de frijol chino (de estos últimos hay todo el año, pero se sirven sobre todo en fiestas tradicionales de la zona). Además hay atole, los clásicos de champurrado de chocolate y de arroz. Dicen que el champurrado de Doña Cristi Uribe es el más rico de Tepoztlán.
¿Dónde? Encuentra estas delicias en la explanada del Ayuntamiento, del lado del zócalo, a la altura de la escuela Escuadrón 201.
Taquitos de bistec con Toño
Estos tacos son una maravilla. El puesto que lleva el señor Toño en el patio de su casa es famoso por el bistec con cebolla. Si eres fanático de los tacos, no te los puedes perder. Recuerda probar la salsita de chiles toreados con soya. No es lo más tradicional del mundo, pero le va perfecto a estos taquitos.
¿Dónde? En calle Buenavista, subiendo desde el punto donde convergen la avenida del Tepozteco y la avenida Revolución, verás a unos metros el puesto en el patio, iluminado con luz cálida y cubierto por una lona azulada.
O si de verdad quieres comer como local… échate un rico “taco placero”
Los tacos placeros te los haces tu mismo. En el mercado consigues tortillas, ensalada de nopal, guacamole, queso fresco, salsa y chicharrón y te amas unos ricos taquitos con lo mejor de la región.
