De entre los muchos municipios de Morelos, Yautepec es uno bien querido. Y detrás de este orgullo hay buenas razones. Si eres de allí, lo sabe; pero si aún no conoces este sitio, te damos 3 grandes razones para visitarlo. Tal vez no lo sabías, pero ha conquistado a grandes personajes y tú también te vas a enamorar.
Su profunda historia
Se dice que nuestra capital histórica es Cuautla, por haber sido escenario de múltiples momentos relevantes en el pasado; pero los habitantes del “Cerro del pericón” no tienen nada que envidiarle. Los monumentos históricos son los gigantescos testigos de piedra que lo confirman. En Yautepec puedes encontrar una de las 8 zonas arqueológicas de Morelos. Las antiguas edificaciones consolidadas por la cultura olmeca se encuentran en muy buenas condiciones.
Además aquí puedes admirar el ex convento de la Asunción construido por la orden dominica hacia 1560. Son famosas además, por su espectacular arquitectura, las haciendas como la de Cocoyoc, que albergaron durante la colonia a las familias españolas de alto abolengo. Por abundar ahí el cultivo de caña, el municipio es también parte de la ruta de Zapata; pues el Caudillo luchó en contra de los hacendados. La importancia de la zona, le valió el título de capital de Morelos cuando recién se inauguró el estado, y aunque ya no mantiene el título continúa siendo un centro que refuerza la identidad local.
Su belleza natural
Tan bello es Yautepec, que cautivó profundamente el gusto exquisito de Moctezuma. Se cuenta que, obsesivamente, el tlatoani creó un jardín botánico en Oaxtepec, para exhibir frente a sus allegados las más hermosas flores de la región. Además, aún se guarda preciosos sitios poblados por la naturaleza, como el mirador del cerro del Tenayo, que ofrece una vista espectacular del municipio. Además el Río Yautepec es uno de los más importantes del estado y alimenta balnearios increíbles (como Las Estacas).
Su vibrante cultura
En Yautepec las fiestas patronales son constantes y se celebran en grande. Es así, que, aunque la mítica figura del chinelo surgió en Tlayacapan, este municipio tiene su propia versión: la más colorida de todas. Su carnaval es por cierto, tremendo, e involucra otras celebraciones como la marcha de “las viudas del mal humor”. Además, se mantiene muy viva la tradición de la banda de viento, que es la música típica de la región. No falta la producción artesanal, especialmente de cerámica; tampoco la buena comida, desde el clásico mole rojo de guajolote, hasta la barbacoa de cabrito y los deliciosos tlacoyos de haba. Si dudabas de su diversidad, Yautepec es hogar de comunidades indígenas hablantes del náhuatl que, además, son responsables de mantener vivas muchas de estas ricas (y deliciosas) tradiciones.