Sin duda, una de las razones irrefutables para visitar Morelos es su gastronomía. Fuertemente influenciada por nuestros grupos indígenas y por las tradiciones de la Colonia, cada uno de los platillos que la componen le cuenta al comensal un poco de nuestra profunda historia. Por otro lado, las recetas típicas sacan lo mejor de los ingredientes, frescos y deliciosos que se cultivan aquí.
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Así, para quien nos visita hay una lista de comidas imperdibles, delicias que nosotros disfrutamos cotidianamente, pero que nunca dejan de saber extraordinarias. Algunas de ellas, como el pipián y el pozole, no son exclusivas de nuestro estado, pero han encontrado aquí buena fama, después de haber sido traídas por sujetos que migraron de sitios como Oaxaca y Guerrero. Otras, como los esquites y el huauzontle, sin duda encuentran su mejor versión en nuestras cocinas. La cosa es que tienes que, si nos visitas, tienes que probarlas todas, de otra manera no podrías decir que realmente estuviste en Morelos.
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Cecina
Fotografía: Ian Benet.
La clásica carne de res curada con sal es definitivamente imperdible y no tienes excusa. Puedes encontrar cecina en cualquier parte del estado, aunque prácticamente toda se produce en un solo municipio: Yecapixtla. Es deliciosa y su mejor versión es en un rico taco campechano, con fresca longaniza, crema de primera calidad, nopales, rábanos y salsa.
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Pipián verde
Este rico mole es muy peculiar, se hace con pepitas de calabaza y tomate, de ahí toma el precioso color. Es un mole perfumado, muy rico y con mucha textura, en Morelos se acostumbra servirlo con pollo y tamales de sal en algunas fiestas patronales y es un básico en nuestra ofrenda del día de muertos.
Caldo de hongos
Los hongos de cazahuate abundan en nuestros bosques y son el ingrediente principal de este nutritivo delicioso y reconfortante caldo. Aprende a prepararlo aquí.
Tacos acorazados
Una de las recetas más tradicionales, que también puedes encontrar por todo Morelos, pues es el clásico almuerzo. Originaria de Cuautla, se cuenta que estos tacos compuestos por dos tortillas, una cama de arroz Morelos rojo y un relleno (huevo duro, chile relleno, tortitas de ejote, salchicha) fueron inventados en tiempos de la Revolución por la señora Felícitas Sánchez y toman su nombre de los barcos acorazados de la primera guerra mundial. Aprende a prepararlos aquí.
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Pozole blanco
Traído a nosotros por nuestros hermanos de Guerrero, hemos logrado perfeccionar la receta de este clásico platillo mexicano, a pesar de su ominoso origen caníbal.
Tamal de pescado
Un verdadero clásico morelense y uno de los platillos que conservan su receta desde tiempos prehispánicos. No te vas a arrepentir de probar nuestros frescos pescados en esta curiosa presentación.
Esquites
Nuestra versión de los esquites es muy sencilla y super saludable, porque prácticamente no tiene grasa, ni caldo de pollo. En realidad saca su perfume del epazote, su dulzura del puro maíz y su sazón del chile serrano. Aprende a preparar los clásicos esquites morelenses aquí.
Huauzontle
Esta planta es similar al amaranto, en apariencia y también porque es increíblemente nutritivo. Se dice que en tiempos de Moctezuma era uno de los más importantes cultivos, junto al maíz, el frijol y la chía. En Morelos se come capeado y en ocasiones relleno de queso y bañado en un rico caldillo de jitomate. Es realmente delicioso.
Tlacoyos
Los tlacoyos también se encuentran en diferentes estados del país, pero en Morelos son básicos. Se rellenan comúnmente de haba, frijol chino, frijol negro, requesón o chales (el asiento del chicharrón) y se sirven con chilitos. Tradicionalmente se cocinan en comal de barro, con cal en lugar de grasa.
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Itacates
No te dejes engañar: no son “parecidos a los tlacoyos”. Aunque también están hechos con masa de maíz, son completamente diferentes. Estos son triangulares, mucho más gruesos, el relleno no va envuelto por la masa, sino que se rellenan cuando ya están cocidos. La preparación es, además, distinta, estos llevan manteca entre sus ingredientes y rico queso, dándole al itacate una textura esponjosa, casi como un tamal. Lo puedes comer con tu guisado preferido y van aderezados con crema y más quesito rallado.
Tacos de chapulines al ajillo
Fotografía: Carolina Jaramillo.
Los chapulines son un alimento tristemente despreciado. Algunos lo rechazan porque les da asco comer bichitos. Otros, porque en los restaurantes en donde suelen servirlos, son increíblemente caros. Pero en los mercados morelenses los encuentras a buen precio, aderezados al mojo de ajo, o simplemente con limón y sal. Aunque no se te antojen, deberías probarlos, porque son deliciosos e inmensamente nutritivos. Aprende a prepararlos aquí.
Frijoles ayocotes en adobo
Estos curiosos frijoles son gigantescos, en comparación con sus populares primos, además son de color púrpura. Cocidos son deliciosos y en Morelos nos gusta servirlos en adobo o con mole rojo. Son realmente ricos y si los encuentras, no tienes permiso de no probarlos.
Nieves y helados
Fotografía: Ian Benet.
Uno de nuestros postres predilectos son las nieves y helados, que acostumbramos preparar con ricas frutas frescas locales como la chirimoya y el zapote. ¡Te van a encantar!
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*Imagen destacada: Ian Benet.
